miércoles, 19 de agosto de 2009

El Chalten, Emblemático!!!

Visitamos a El CHALTEN.Ubicación geográfica: Pcia de Santa Cruz- Patagonia Austral.
Datos:* Fecha del viaje: marzo/2008.
* Integrantes: el matrimonio de los abuelos Carlos y Susana. * Motivo: descubrir dos localidades del extremo sur argentino.
* Itinerario: Aeroparque a Calafate, luego Ushuaia y regreso.
* Extensión: 7000 km. Duración: 11 días.
RELATO.
Desde un año atrás la abuela Susana venía insistiendo en visitar estos destinos con traslados aéreos; tenía la idea fija y no retrocedía en sus intenciones.
Yo pensaba ir con en auto para comenzar a explorar desde Comodoro Rivadavia al sur, cruzar el estrecho de Magallanes y llegar a Ushuaia.
El regreso: pasar por El Calafate y recorrer la ruta 40 al norte para encaminarnos a casa. Era ambicioso pero posible; mayor cantidad de tiempo, costo y largos tramos de ripio; pero quien te quita lo conocido!!!
Para ambas posturas se oponían algunos puntos: depender de la aerolínea con sus cancelaciones e imprevistos cambios, insuficiencia de combustible por conflictos y la idea fija de Susana.
Tras extensas discusiones, acordamos por la postura de Susana, en caso contrario: divorcio.
Itinerario.
Día 1- viernes 07/03/2008- Bien temprano partimos hacia El Calafate.
La ansiedad de Susana y su temor a llegar tarde hizo que dos horas antes de la partida ingresemos al hall de LADE en Aeroparque... Temía perder el vuelo!!!
Chequeo, embarque en un Fockker F-28, de 60 a 65 asientos de capacidad, con escalas en Mar del Plata y Comodoro Rivadavia. Nos ubicamos delante del ala y sobre el lado derecho.
Vuelo tranquilo con sol arriba de las nubes hasta Comodoro, de allí observando la estepa patagónica desde el aire. Un desayuno luego de cada ascenso y sándwiches al final.
Arribamos a las 12:15 hs al aeropuerto de Lago Argentino en Calafate.
Compartimos el remís con una joven pareja española hasta nuestra hostería, al ingreso del pueblo.
Muy rápido arrancamos a pie al centro -unas 15 cuadras- un muy breve vistazo y a la terminal de micros para indagar horarios para viajar al glaciar. Allí fuimos, navegamos por el brazo Rico hasta el frontón helado.
Luego recorrimos todas las pasarelas y nos dimos el gustazo de saborear unos mates calentitos con la excelente vista del blanco paredón de hielo y profundo azul de sus grietas. No se repite tan seguido!!!. Al regreso a la ciudad indagamos sobre las posibilidades para el siguiente día de llegar a "El Chaltén".

Día 2- sábado 08/03/2008- intentamos encarar el nuevo paseo al pueblo vecino.
Despertamos bien temprano, duchas, desayuno y rápido a la terminal de micros. Motivo: la posibilidad de obtener pasajes a El Chaltén, distante unos 230 km.
Mucha suerte, salimos inmediatamente en el servicio de refuerzo junto a otras 5 parejas más de turistas extranjeros. Los únicos nacionales éramos nosotros y el conductor, un joven salteño.
Aún oscuro, el tiempo no se presentaba bien y lloviznaba, amaneció nublado, comenzaron luego algunas débiles resolanas, finalmente salió el sol y fue un muy buen día, aunque bastante fresco.
Hermoso recorrido que bordea la cabecera del lago Viedma para acercarse a las alturas santacruceñas.
Una zona bella y natural, bastante dura, aún no invadida por el turismo masivo.
El pintoresco camino recorre la RN 40 al norte y comienza con el cruce del ancho río Santa Cruz, próximo a su naciente en el lago Argentino.
Luego se traspasa el río Las Leonas poco antes de su desembocadura –que vincula los lagos Argentino y Viedma- y nos acompaña por más de 54 kms.
Nos detenemos en el parador Luz Divina, más adelante esta el antiguo hotel Las Leonas; desde ambas se aprecia la cercanía del agua del río Las Leonas por sus bosquecillos de sauces y álamos en medio de los pastos duros de la estepa.
A los 130 km el desvío por la RP 23 hacia el oeste, que corre arrimada a la margen norte del lago Viedma y deja ver como telón lejano las cumbres cordilleranas.
Este lago de forma alargada va de oeste a este, con casi 80 km de largo y promedio de unos 15 km de ancho, de más de 1.000 km2 de superficie recibe en su ribera oeste al gran glaciar Viedma, las aguas del campo de hielo y las de los cerros Torre, Chaltén o Fitz Roy, Puntiagudo y otros pertenecientes al Parque Los Glaciares.
Tras el cruce de puentes de los ríos Barrancas y de Las Vueltas se ingresa a dicho Parque Nacional..
Ya se venía divisando a lo lejos la silueta del famoso cerro Fitz Roy o Chaltén, casi siempre rodeado de nubes. Originalmente los tehuelches lo denominaron Chaltén, que significa “montaña de humo”en lengua aonikenk.
Luego el perito Francisco Moreno lo re-denominó Fitz Roy en honor a un marino inglés y gran explorador del extremo sur de América.
En un punto panorámico se detiene el vehículo, bajamos a disfrutarlo y tomar fotografías.
Allí enfrente su silueta inconfundible, con sus picos helados entre algunas nubes y blancos glaciares a su alrededor. Impresiona, Majestuoso, Inconfundible !!!.
El legendario Chaltén o Fitz Roy es uno de los picos más hermosos y emblemáticos de la Cordillera de los Andes Austral, se deja admirar.
Un macizo granítico de afiladas paredes formado por rocas de extrema dureza y una cúpula de hielo eterno.
Una cumbre trágica y deseada por andinistas de todo el mundo que, escondida entre las nubes, preside un cordón montañoso rico en leyendas.
Una maravilla natural, cumbre de 3441 mts de altitud, que junto a los cerros Torre de 3128 mts, Aguja Poincenot de 3002 mts, Puntiagudo de 1768 mts, Saint Exupery, Egger, Techado Negro, Adela y otros es imán de los amantes del montañismo del mundo.

A las 11:10 hs el ingreso al joven poblado de montaña “El Chaltén” (creado en 1985), ubicado dentro del Parque Nacional, pequeño y pintoresco, encerrado entre laderas de los cerros y ubicado al pie del imponente cerro Chaltén o Fitz Roy, declarado capital nacional del trekking por las intensas actividades que se pueden realizar de a pie y en contacto con la pura naturaleza.
Compramos alimentos, almorzamos al aire libre junto al río y nos dirigimos hacia la cascada El Chorrillo por el camino que se dirige a la laguna del Desierto.
Es una importante caída de agua que proviene desde lo alto de la ladera; forma un abundante y límpido arroyo que discurre entre las rocas con destino al cercano río de las Vueltas.
Al regreso adquirimos algo en la panadería del pueblo para acompañar el mate, tomamos un descanso y gozamos el solcito en una magnifica y fresca tarde.
Conversamos cordialmente con una pareja de turistas suizos que viajaron en el mismo bus; nos entendimos, aún con la dificultad del idioma.
Caminamos por calles del poblado hasta partir de regreso. Mirando hacia arriba y ahí no más, las siluetas oscuras de los picos, ahora con luz solar de fondo. Impresionante!!!
Desde el bus nuevamente disfrutamos del paisaje: reflejo del sol en el agua del gran lago y todos los cerros en sombras en el ocaso del día.
Final de la jornada: intensa, comenzó muy temprano, concluyó de noche y tarde; satisfechos por haber tenido la oportunidad de contemplar y gozar a El Chaltén.
Nuestras vivencias.Es sabido que nos atraen las montañas y las disfrutamos a todas, pero algunas nos resultan distintas.
Siempre las observamos y admiramos. Nos producen sensaciones especiales.Ellas son el enorme y majestuoso Aconcagua, el distinguido y bello Tupungato, el vistoso y colorido Cerro de los Siete Colores y el siempre blanco Lanín.
Ahora se nos incorporó uno nuevo: el cerro El Chaltén o denominado actualmente Fitz Roy.
Su imponente silueta es visible desde toda la localidad y áreas más lejanas de la zona.
Es un símbolo de la patagonia austral y un desafío para los andinistas a lo largo del tiempo.

Las fotografías son de nuestra propiedad.
Experincia vivida por Carlos Massarutto y Susana Villa- Lomas del Mirador Bs.As.- marzo/2008.